jueves, 8 de mayo de 2014
El azote de los dioses.
Los Titanes gigantescos que se abalanzan cada tarde sobre mi cansado patio trasero, son seres sin alma. Sin corazón o mente. No tienen alma y tampoco piensan; parecen vivos. Y ahí es donde me detengo y pienso en si antes de ser como soy -alguien como yo, un humano-, fui como ellos. Y descubro la verdad: Mi cuerpo, hecho de agua y polvo genera, conserva y transmite, electricidad. Para finalmente apagarse -solo queda el polvo- cuando el agua se va y la electricidad no fluye mas. Como la nube, como la tromba o la gran tormenta tropical, soy yo, o fui. Seres sin alma e incomprensibles, pero poderosos; capaces de transformar -como aquellos en mi patio trasero- un Planeta.
http://www.ssd.noaa.gov/goes/east/watl/flash-rgb.html