lunes, 19 de agosto de 2013


La huella lenta.

El gigante camina despacio por sobre los prados verdes que sostenían la vida. Su cuerpo de polvo seco sopla por entre las cobijas viejas de las casas marchitadas y ennegrecidas por el rayo del sol que hiere como la navaja delgada que corta el fino papel. El divino rayo trastoco en pánico; su vital fuerza en incansable y despiadado látigo.
Eleva este el agua hacia el viento, llevando lejos los sueños y anhelos de los hijos de la humana que llora y palidece ante los impulsos vitales de la naturaleza que la rodea y de la cual es parte indeleble. Siente sobre su cuerpo el poder de la vida, de un planeta, al ser aplastada contra la tierra seca por los gigantes que despertó con el ruido y el humo de sus máquinas.


http://www.vanguardia.com.mx/colapsansimasdelalaguna-1812961.html

http://noticias.tuhistory.com/lluvia-de-pajaros-muertos