jueves, 26 de diciembre de 2013


Sumer

Un planeta oscuro, olvidado, visita de vez en vez la tierra. El mundo de Sumer o Sumeria era, para cuando uno de ellos apareció en el firmamento, vasto y firme. Sentado sobre 2500 años de prosperidad creciente. Siglos de estabilidad y creciente buen clima que forjaron un humano más constructivo.

Las apariciones -cometas, meteoros, luces atmosféricas- eran impresionantes despliegues en una atmósfera todavía no cegada por la luz eléctrica, que aleja toda oscuridad con potentísimo fulgor, y dictaban el color del tinte a la emoción de aquel encomendado a mirar el cielo para entenderlo. El brillo de un astro nuevo, uno más de aquellos pocos que, entre los miles de millones de luces del firmamento, no titilan, dejando ver en su brillo el misterio de su extraño y sutil comportamiento; así como un atisbo de su cuerpo, ya que uno es rojo y la luna -en una noche clara de invierno- es blanca como la misma luz del sol. Podemos suponer una conversación entre un casual y un lector del cielo nocturno:

Dice el paseante: "¿Pero aquél, que es? No titila. Es como los demás. ¿Cuando apareció?"
Contesta el otro: "Ha venido haciéndose más grande." "¿Desde cuando?" "No lo se, lo vi apenas, tiempo atrás." ¿"Qué es?" insiste el otro. "Un fantasma, eso es."

Mas atentos al mundo que los había oprimido desde el origen de sus recuerdos: historias contadas por los padres; los humanos vieron pasar aquel vagabundo, y soñaron su regreso. Niburu lo llamaron. Su nombre quedo escrito tan profundamente, seguramente auspiciado por la grave impresión de tan maravillosa aparición, que perdura como severa huella que le quedo a la vecindad humana de aquellos tiempos: La visión de un fantasma. Un caminante que pasa sin detenerse para nunca regresar. Un nuevo -pero igual

Hoy, otro planeta aparece en el cielo nocturno. Los ojos del humano que hoy escudriñan el cielo nocturno son cientos de miles de veces más potentes que los de aquel, quien en el pasado escribió su nombre por primera vez -y muchos mas- en la arcilla fresca de la tablilla de aquellas noches en las faldas de los montes hoy conocidos como Zagros. Sin embargo, aunque los ojos lo pueden ver mas de cerca, no dejara de ser un fantasma, destinado a desaparecer para no regresar.




http://www.lacronica.com/EdicionEnLinea/Notas/CienciayTecnologia/19122013/788220-Hallan-la-primera-exoluna.html

http://es.wikipedia.org/wiki/Nibiru_(planeta)