jueves, 15 de noviembre de 2012
No hace falta que suceda, para que pase.
Todo esta dicho. Los hechos y los personajes se abultan unos tras otros para anunciar lo esperado. Con ansia y profunda introspección, el humano se abandona al espíritu que, solaz, se relaja en su plena abundancia; su desgano de un dios: de un orden y un futuro.
Miramos lo que ansiamos ver. La realidad corre en otro tren.
http://www.milenio.com/cdb/doc/noticias2011/ed9c1841a291c48cf1ab974a3faad552
http://es.wikipedia.org/wiki/Nibiru_(planeta)